Por: Roberto
Chambi Calle (*). Más de dos mil muertos, una ciudad que es la cárcel más
grande del mundo reducida prácticamente a ruinas; sin escuelas, hospitales,
energía eléctrica y agua; Gaza el 2014 sufrió una masacre inmisericorde por
parte del régimen israelí, no siendo hasta la fecha sancionado por ninguna
corte regional o internacional; pero el castigo no solo se limita a esta región,
sino Cisjordania y Jerusalén Este, siendo los mismos reducidos a islas
incomunicadas donde no hay paz, ni seguridad cuando el ejército israelí asedia
y acompaña cada día los asentamientos de sus colonos en un territorio que fue invadido, usurpado echándose a sus habitantes
quienes al querer retornar perdían un
ojo, quedaban lisiados o finalmente asesinados: balas, misiles y sangre fueron
y son las únicas repuestas del régimen sionista a los Palestinos.
Después del ataque de Israel a la franja de Gaza,
muchos internacionalistas tenían la esperanza de que la Corte Penal
Internacional sancionara los crímenes del ente israelí, pensándose ingenuamente
que Palestina podía acudir a ésta. Vanos han sido los intentos hasta ahora cuando
los acusados de estos crímenes; Israel y EE.UU. no han firmado el Estatuto de
Roma que da origen a la CPI.
Todo lo contrario, estos dos acusados tienen tal grado
de desfachatez que incluso se han atrevido a amedrentar el trabajo de la Corte,
así por ejemplo en abril pasado el secretario de estado de Norteamérica Mike Pompeo
manifestó “que la corte penal internacional es un órgano político y no una
institución judicial” asimismo amenazó diciendo que “si la corte sigue
en este camino actual contra Israel habrá consecuencias” las que se han cristalizado
cuando la administración de Trump en junio de 2020 autorizó sanciones económicas a sus
funcionarios; pues los mismos están investigando los crímenes de guerra y lesa humanidad que
habrían cometido las tropas norteamericanas en Afganistán, tachando a la CPI
como “corrupta”, sin hasta la fecha presentar pruebas de sus acusaciones
agregando así mismo que sus tropas “estén
tranquilas” “que los hombres y
mujeres de las fuerzas armadas de EE.UU. no comparecerán nunca ante la CPI"
(https://www.efe.com/efe/america/politica/trump-acusa-de-corrupta-a-la-cpi-y-autoriza-sanciones-contra-funcionarios/20000035-4269122)
La cuestión de
los derechos de Palestina con respecto a la vulneración de sus derechos puede
ser peticionada a la Corte para así castigarse a los autores de los crímenes
perpetrados en Gaza Cisjordania y Jerusalén Este; pero para ello se hace importante
romper el cerco que en este momento está imponiendo EEUU e Israel, pues como
dice la periodista en Medio Oriente Sdenka Saavedra “El sionismo ha buscado frenéticamente
anexionar a Cisjordania y Gaza, y como vemos sus acciones apuntan a eso,
irrumpiendo y contradiciendo al derecho internacional”.
Un
paso importante de la Corte fue que en el 2019 la fiscal Fatou Bensouda dijo “Estoy
convencida de que se han cometido o se están cometiendo crímenes de guerra en
Cisjordania, incluida Jerusalén Oriental (Al-Quds), y la Franja de Gaza”(https://www.icc-cpi.int/Pages/item.aspx?name=20191220-otp-statement-palestine); asimismo en abril pasado, la fiscal presentó un documento de 60 páginas
donde se expone las bases legales para el procesamiento de los actos criminales
de Israel “existiendo una base razonable” cuando en el 2014 las fuerzas israelíes
lanzaron ataques desmedidos cometiendo crímenes de guerra contra la población, así
mismo hace mención a tres incidentes focalizados: 1ro) Matanza intencional, 2do)
Intencionalmente causar lesiones graves al cuerpo y a la salud y 3ro) Dirigir
intencionalmente un ataque contra objetos o personas que usan emblemas
distintivos de los convenios de Ginebra. Asimismo, este criterio legal por
parte de la fiscalía hace mención también a la ocupación de Cisjordania por
parte de las autoridades israelíes, quienes han cometido crímenes de guerra
cuando se transfería civiles israelíes en Cisjordania.
El documento también hace mención que la investigación
podía alcanzar a los delitos cometidos por las fuerzas israelíes en relación al
uso de medios no letales y letales contra las personas que participaron en las
manifestaciones que comenzaron en marzo de 2018 cerca de las vallas fronterizas
entre la franja de Gaza e Israel en donde según informes hubo un saldo de más
de 200 personas asesinadas; así como muchos heridos.
Los delitos cometidos por el régimen israelí son vox
populi y quienes no la reconocen como tal son cómplices de los crímenes de lesa
Humanidad, Genocidio y apartheid. El pueblo Palestino hoy requiere el apoyo
y la solidaridad del mundo, por ello es necesario que las intenciones de los
países pasen del discurso metafórico, la poesía romántica y los cantos de
sirena a la acción pragmática, cristalizándose éstas en su política exterior e
internacional; denunciando ante estrados
judiciales regionales e internacionales, rompiendo relaciones diplomáticas u ordenando el boicot
a productos israelíes, ejemplo palmario de ello fue cuando el 1er Presidente Indígena
del Estado Plurinacional de Bolivia Evo Morales Ayma cortó relaciones diplomáticas con la Embajada Israelí
en Bolivia como muestra de su compromiso por la paz más aun cuando el 2014 se asesinó
a más de 2000 palestinos en la “operación margen protector”, así mismo ha sido ejemplificadora
la intervención del Embajador Boliviano en
Naciones Unidas cuando en el 2018 en plena reunión del Consejo de
Seguridad Sacha Llorenti, instó al
Consejo de Seguridad una resolución para la protección internación al de los Civiles
Palestinos así como fue contundente en sus denuncias en pleno de la reunión del
Consejo ; estas muestras de apoyo citando el caso Boliviano, hoy se han diluido,
pues el país andino está encapsulado en un régimen transitorio, quien a la
fecha ha retomado relaciones diplomáticas con el ente Israelí dejándose en el olvido malicioso la ayuda al Pueblo Palestino.
(*)Cientista Jurídico, Analista en Relaciones Internacionales, Teólogo especialista en Religiones Comparadas y Miembro del Comité para el Estudio y la Difusión del Derecho en América Latina (CEDDAL).